miércoles, noviembre 08, 2006

Libertad para preguntar

No existe la definición formal de periodista ya que existen muchas formas de definir la profesión;unas son buenas y otras no tanto, pero podríamos llegar a la conclusión de que la base sobre la que se asienta el periodismo es la información. Un periodista informa sobre lo que pasa no sólo a su al rededor sino en todo el mundo al resto de los mortales, es decir , los que no tienen apenas acceso a la información (la única que conocen es la que les proporcionan los periodistas).Es importante tener en cuenta este aspecto para el tema que voy a desarrollar aquí y hay que partir de una base. Para que un periodista pueda cumplir con su condición deberá informarse, deberá preguntar y buscar para obtener ésa información. El problema viene cuando no se les deja preguntar para saber, que es lo que sucede en las ruedas de prensa de los políticos españoles. Los periodistas están molestos con los lideres políticos no admitan preguntas en las ruedas de prensa.

La Asociación de Prensa de Madrid ha protestado (formalmente) porque en las ruedas de prensa que se organizan, no se admiten preguntas de los periodistas. Aunque,por ejemplo, según José Blanco, contesta a las preguntas de los periodistas semanalmente o, muy de vez en cuando en el caso del resto de los políticos. Los periodistas que se encargan de cubrir la información política están molestos por éstas razón. La APM señalizó que ésto supone un "perjuicio al derecho de los ciudadanos a una información contrastada y completa".Además de privar a los ciudadanos el derecho de la información, los periodistas pierden su condición como tal. Entonces ¿Para qué están?habíamos quedado en que los periodistas están para informar... Podría decirse que las ruedas de prensa perderán su condición como lo que son. Si únicamente consisten en escuchar los discursos de los políticos perderán su sentido. La queja va sobretodo dirigida al Gobierno actual y a la oposición. Desde distintas instancias de la profesión periodística se critica éste mal habito , o también llamada "práctica deplorable", por parte de los diferentes líderes políticos.

Los ejemplos mas claros y mas recientes los tenemos con el Presidente del Gobierno y con el de la oposición; cuando el Presidente del Gobierno Jose Luis R. Zapatero no admitió preguntas cuando presentaba la candidatura para la alcaldía de Miguel Sebastián o cuando Mariano Rajoy expuso su discurso (de cinco folios) criticando al gobierno acerca de la negociación con ETA, y no dejó tiempo para preguntas. Ante éste panorama la APM criticó éste comportamiento y afirmó que faltaba a la libertad y a la democracia. Junto a esta también personajes ilustres defienden a los periodistas en éste aspecto; Larraya, Defensor del Lector del diario El País, concluye:"Las ruedas de prensa sin preguntas son, como las cervezas sin alcohol, una necesidad del mercado".Y Vicente Jiménez, director adjunto del periódico, después de decir que "una conferencia de prensa sin preguntas de los periodistas es un sinsentido".

Efectivamente, es una necesidad por parte de la sociedad. Esto hace que perdamos libertad informativa ya que la información que nos llega está completamente limitada, pues se ciñe a lo que el político quiere comunicarnos, no lo que de verdad nosotros pretendemos saber. Mientras los medios y los periodistas sigan publicando declaraciones, el marketing y la propaganda seguirán imponiéndose a la información.

Aunque existe un doble planteamiento. Mientras los políticos marcan una tendencia que quieren seguir en el terreno de la información para exponer sus proyectos políticos, los medios van por otro lado. Lo que uno quiere saber, el otro lo esconde. Cada una de las partes informa sobre lo que quiere y al final somos nosotros los que salimos perdiendo...

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Marta Lucas.

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